Dificultad: para toda la familia
Tiempo aproximado: 2 horas (con paradas)
Distancia recorrida: 8 kilómetros aproximadamente
Desnivel: 70 metros
Altitud máxima: 70 metros
Tipo de camino: pista de tierra y acera en su tramo final
Es un paseo ideal para no tener que coger el coche, ya que parte del hotel para volver al mismo en un trazado circular, sencillo y muy bonito.
Aunque el paseo puede hacerse en ambos sentidos, proponemos hacerla de este a oeste, aunque en este caso los últimos dos kilómetros de la ruta serían en pendiente ascendente.
Salimos del hotel en dirección a Porrúa, internándonos en el pueblo en dirección este, tomando la calle que deja el bar de la Bolera a mano derecha y siguiéndola hasta el final.
Tras dejar las últimas casas del pueblo del barrio de El Collau, el trazado transcurre en dirección noroeste, atravesando prados y pequeñas zonas boscosas hasta llegar a un puente sobre la autovía A-8, el cuál atravesaremos para continuar en dirección al pueblo de Poo.
A unos 700 metros del puente, y tras haber dejado atrás un paso a nivel sobre las vías del ferrocarril, el camino se desvía a mano izquierda, para acompañar al río Vallina prácticamente hasta su desembocadura, en un pequeño tramo sobre un precioso puente de madera. Habrá que tener especial cuidado porque suele estar bastante resbaladizo.
Atravesamos el extremo occidental del pueblo de Poo hasta que encontramos la carretera que va a Llanes (AS-379), que habrá que cruzar en dirección norte enlazando con un tramo del camino de Santiago y la llamada «senda costera».
A partir de este punto el paseo se vuelve eminentemente costero, con vistas espectaculares de la playa de Poo o las de El Portiellu y San Martín. Esta última tiene unas ruinas de la ermita homónima, que os recomendamos visitar.
Dejamos de nuevo la costa para adentrarnos en Celorio, atravesando el pueblo en su parte sur hasta salir de nuevo a la carretera de Llanes, para enlazar con la carretera de Porrúa y llegar de nuevo al hotel.
